J11: Pasión en verde y blanco

 

Pasión en verde y blanco

 

 

Inolvidable es la palabra correcta. Decir impresionante es exagerar el juego de un partido muy normalito; increíble es impreciso, porque no se jugaba un UDB-Milán; irrepetible es aventurero, porque en tres meses viviremos otro bonito espectáculo en el Municipal Francisco Pérez Álvarez "Rivera". Pero inolvidable, sí.

Inolvidable la cola para entrar al campo, con dos gradas llenas como en un Sevilla-Betis: el fondo rojo, y el fondo verdiblanco. Lo de las aficiones el domingo fue un ejemplo extraordinario, una muestra de cómo el fútbol une generaciones, familias, tradiciones e historia. Los "panzones" se rieron con guasa de nuestras bufandas (desde NyJCortés podemos garantizar que no se la compramos a los chinos), y el "Frente Culebrón" botó sin parar para que no se les confundiera con los usagreños.

Inolvidable el himno del primer minuto. Banderas en alto, voz en grito y todos a una: "Yo, te quiero daaaar, algo de corazóoon". El repertorio fue extenso y variado, con recuerdo de la hazaña italiana entre otras. A veces, en el fútbol, los partidos se pierden en el primer minuto. En esta ocasión, la Unión comenzó entonces a ganarlo.

Inolvidable los goles y la emoción. Los tantos de Pacheco (0-1) y Julio (1-3), asistidos ambos por la entrañable ayuda de los porteros rivales. El gol ilusionante del CD Usagre, que apretó de lo lindo en la segunda parte, y que mereció empatar (1-1). Y el impetuoso testarazo de Mora, a lo Puyol en el Mundial, que inclinó la balanza para la Unión cuando más lo necesitábamos (1-2).

Inolvidable el comportamiento de "nuestros" panzones. Vaya desde esta tribuna nuestro reconocimiento a Javi Canana, Lolo, Pacheco, Ligero y Sánchez (perdón si me olvido de alguno), que aguantaron el papelón de defender al vecino en la casa propia. Y dignificaron la verdiblanca con un juego entregado desde el primer hasta el último minuto, coronado por el gol de Pacheco. Desde el domingo, la Unión os debe una.

E inolvidable, en fin, la experiencia de haber vivido dos horas de un espectáculo precioso. Sin mucho fútbol, cierto es, pero con dos pueblos entregados a sus equipos sin faltar al rival, con niños que conocieron por primera vez la pasión de un derbi y con adultos que nunca imaginaron volverlo a ver. Por primera vez, no he visto para hacer esta crónica los puntos que hemos sumado, ni en qué posición estamos ahora en la tabla. Me basta con mantener en la retina lo que vivi el domingo; en conservar, lo más intacta posible, esta pasión en verde y blanco.

Las anécdotas de la jornada:

  • No nos olvidamos tampoco de los jugadores que vistieron la camiseta de la Unión y que volvieron a casa. Mona y Vinagre, también vosotros sois parte de la humilde historia de nuestro equipo.
  • Pablo Martínez y Agustín Ruiz fueron los afortunados que se llevaron las entradas para el derbi por animar a la Unión en nuestras redes sociales (www.facebook.com/nyjcortes  /  @nyjcortes1). Enhorabuena, ¡y gracias!
  • No os perdáis los vídeos de la web. Para guardar en vuestro museo futbolístico...
  • Toda la suerte para los vecinos de Usagre en lo que queda de Liga. Sabemos lo que es estar ahí abajo, y parece que no hay salida. Pero la hay.